Una gran brecha entre la silvicultura de la situación económica y financiera, por un lado, y el comportamiento de los funcionarios, por el otro Esta brecha se refleja en:
– Continuación de la política de gasto durante el período anterior sin ningún cambio, a pesar de la escalada de las ofertas sobre la necesidad de detener el desperdicio y el gasto inútil y otros. Así como la continuación de la política de incumplimiento de los mecanismos oficiales en los mandatos, licitaciones y acuerdos.
La evidencia más destacada de la continuación de este enfoque es la adopción y el tratamiento de París 4 como la salvación esperada para el país.
Se supone que dos factores articulares marcan un rumbo diferente del contexto existente: primero: la iniciativa del secretario general de Hezbolá, Sayyed Hassan Nasrallah, sobre el tema socioeconómico y la lucha contra la corrupción, aunque algunos prefieren acortar la iniciativa y limitarla a la último.
Y quizás lo más importante de la iniciativa, el Sayyed vinculó su éxito con él personalmente, con el equilibrio y la credibilidad que le proporciona sinceridad de intención, dirección y objetivo.
Segundo: El anuncio del Presidente de la República, el General Michel Aoun, desde el primer día de su reinado de que el gobierno post-electoral es el primer gobierno del Pacto y con él comenzará la reforma. A pesar de las heridas que han afligido al Covenant durante el período pasado, muchas personas están apostando fuerte por lanzar este taller de reforma.
Las preocupaciones son grandes, múltiples y graves, porque la precisión y la sensibilidad de la situación se encuentran en una etapa avanzada, al igual que el uso de medios de tratamiento temporales y caros. Esto significa que la única opción disponible fuera de las medidas y procedimientos radicales es vender las bases del estado libanés y sus propiedades. La conferencia de París 4 está bajo la bandera de la asociación entre los sectores público y privado. No se han establecido estándares hasta ahora, mientras que el proceso ya ha comenzado y las cuotas y los sectores se han dividido.
Grandes riesgos y mayores esperanzas, mientras que los márgenes se están estrechando y las presiones externas e internas están aumentando.
La negociación excesiva y la flexibilidad pueden desperdiciar una oportunidad preciosa de poner al país de nuevo en el camino de la salvación económica y financiera, y llevarlo a un país viable y a sus hijos, no a una estación o un hotel.