Este año 2015 ha estado marcado por la importancia de la cumbre del clima de diciembre, situando al cambio climático en la mira de políticos y de los medios de comunicación. En París se pretende llegar a un Acuerdo Global que limite las emisiones de gases de efecto invernadero y mantenga el calentamiento del planeta por debajo de los 2°C, en resguardo de la población mundial.
Antes que se inicie en París la 21° Conferencia de las Partes (COP21) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) la semana próxima, les presentamos un resumen de los diferentes eventos que nos han traído a la cumbre de París.
Las Reuniones intersesionales de negociación
Estas reuniones se llevan a cabo entre cada COP y son vitales para hacer avanzar el proceso de negociación. En ellas se reúnen los equipos negociadores de los 195 países miembros de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC). Este año ha sido excepcional y hemos presenciado cuatro rondas de negociación: una en Ginebra (Suiza) y tres en Bonn (Alemania).
En Ginebra. En febrero, esta primera sesión generó el Texto de Ginebra, que se basó en el texto que se logró en la COP20 en Lima. El texto de Ginebra fue el primer texto de negociación consensuado para el acuerdo final de París, e incluía posiciones muy diversas, reflejando las opiniones de los estados miembro.
Bonn. Las tres siguientes sesiones trabajaron sobre el texto de Ginebra para definir mejor sus posiciones, precisar los conceptos y afinar las opciones, con el objetivo de lograr un texto más claro y conciso. En la última sesión, se logró aprobar el texto borrador final del Acuerdo, de 54 páginas, que representa la base de las negociaciones de París.
Reuniones bilaterales y multilaterales
El 2015 ha sido un año repleto de reuniones informales entre organizadores de la COP, negociadores y ministros, así como de importantes reuniones bilaterales
Esperados anuncios. Un evento sin precedentes fue el acuerdo entre China y Estados Unidos. Los principales emisores de gases de efecto invernadero se comprometieron a reducir sus emisiones: EEUU un 28% para 2025, y China dejará de aumentarlas en 2030.
Mujeres de palabra. Alemania y Brasil tuvieron su propio acuerdo bilateral, en el que Dilma Rousseff se comprometió a acabar con la deforestación ilegal de la Amazonia en 2030, además de restaurar doce millones de hectáreas devastadas y neutralizar las emisiones de gases contaminantes debido a la tala de bosques. A su vez, ella y Angela Merkel firmaron un Acuerdo de Intención para ampliar la cooperación en materia de economía y inversiones, incluyendo energías renovables y medio ambiente.
Preparando la cumbre. A principios de noviembre, se celebró en París la pre-COP, un encuentro ministerial donde acudieron 70 países (60 de ellos representados por sus ministros) para hablar de los temas más controversiales de las negociaciones de París. Se acordó que todos los países que faltaban entregarán sus INDCs, se apoyaron las revisiones de las contribuciones cada 5 años y se avanzó en la discusión del financiamiento y la agenda de acción climática.
Compromisos de los países
Un elemento clave del futuro acuerdo de París, son las Contribuciones Nacionalmente Determinadas (iNDC, por sus siglas en inglés) que 176 países han presentado a la CMNUCC. Éstas detallan planes de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, adaptación a los impactos y otros detalles de financiamiento y capacidades. A principios de Noviembre, la CMNUCC publicó un estudio que agregaba la ambición de estas contribuciones, concluyendo que hay un esfuerzo global muy importante para combatir el cambio climático, pero que aún debe ser más ambicioso para no superar el límite de dos grados de incremento de la temperatura.
Eventos paralelos
De manera paralela a las negociaciones sobre cambio climático, se llevaron a cabo otros eventos muy importantes para el camino hacia la COP21.
Mirando al 2030. En la Cumbre para el Desarrollo Sostenible de la ONU de septiembre de 2015, los Estados Miembros de la Organización de las Naciones Unidas aprobaron la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible, que incluye un conjunto de 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible para poner fin a la pobreza, luchar contra la desigualdad y la injusticia, y hacer frente al cambio climático. Estos objetivos son muy importantes para la COP21, ya que enmarcan el cambio climático en la problemática de desarrollo, un tema central para América Latina.
Mostrando avances. Paralelamente a la Asamblea General de las Naciones Unidas, se celebró en Nueva York la Semana del Clima, en la cual los líderes mundiales presentaron cómo los negocios, los gobiernos, el público en general, las organizaciones religiosas y la sociedad civil ya adoptan medidas para catalizar la acción hacia una economía baja en emisiones. La semana incluyó una reunión con 40 jefes de estado, organizada por el Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, con el fin de llegar a un entendimiento común sobre las implicaciones a largo plazo del acuerdo climático. También el Papa Francisco se dirigió a la Asamblea General de la ONU para pedir una acción más decidida frente al cambio climático.
Buenas intenciones. Finalmente, el G20 acordó a principios de Noviembre una serie de Principios para la Cumbre de París. Los países ricos y emergentes se comprometieron a alcanzar un acuerdo “ambicioso, justo, equilibrado, durable y dinámico”, con fuerza legal igualmente aplicable a todos. Acordaron trabajar para limitar el aumento de la temperatura a dos grados según sus responsabilidades y capacidades, pero no lograron ponerse de acuerdo sobre los temas de financiamiento.
La voz de las religiones
Muchos tipos diferentes de actores se han movilizado para pedir un acuerdo justo y vinculante en París. La que seguramente ha generado más revuelo fue la encíclica del Papa Francisco, ‘Laudato Si’. Publicada en mayo, en ella el Papa pide a los más de 1200 millones de católicos de todo el mundo que se sumen a la lucha contra el cambio climático, para proteger a los más vulnerables y al planeta.
En agosto, durante el Simposio Internacional Islámico sobre Cambio Climático, se adoptó la Declaración Islámica sobre el Clima, que también llama a los más de 1600 millones de musulmanes a jugar un papel activo en el combate contra el cambio climático, y urge a los gobiernos a concluir un acuerdo universal y eficaz este año en París.
Estos eventos y acuerdos van a influenciar mucho la manera como van a arrancar las negociaciones de París este próximo lunes, dando impulso y situando algunos temas clave en la agenda de negociación. Esto demuestra la complejidad de estos procesos para llegar a acuerdos globales, pero también la influencia de actores y eventos externos a las negociaciones para influenciar su resultado.