Acceso rápido al espacio, transmisión de datos de alta velocidad y una situación privilegiada son las grandes bazas de un nuevo proyecto comercial a bordo de la Estación Espacial Internacional. Se llama Bartolomeo, y la versatilidad de su diseño permitirá incorporar distintos tipos de misión a precios competitivos a partir del año que viene.
Durante los últimos 20 años, la ISS ha ido creciendo tanto en tamaño como en el número de plataformas dedicadas a la ciencia en órbita. No obstante, los investigadores e ingenieros tienen cada vez más dificultades para conseguir un espacio para sus experimentos.
Una década tras su lanzamiento, el laboratorio europeo Columbus hace sitio en su exterior para una nueva plataforma que ofrece acceso rápido, sencillo y económico al espacio.
Bartolomeo pretende atraer a nuevos usuarios a la Estación, incluida la comunidad de empresas emergentes y emprendedores espaciales. A medida que las compañías se agrupen para aprovechar los recursos de la Estación y reducir costes, irán surgiendo nuevas oportunidades comerciales.
La observación de la Tierra y las telecomunicaciones, la exobiología y la meteorología espacial son algunas áreas de gran demanda que podrán beneficiarse de la nueva plataforma.
El servicio todo en uno para misiones Bartolomeo proporcionará acceso integral para cargas útiles externas en la Estación. Ofrecerá una vista sin obstáculos de la Tierra, control directo terrestre de los experimentos y la posibilidad de recuperar muestras.
La ESA y Airbus Defence and Space han firmado hoy un acuerdo de asociación comercial gracias al cual Bartolomeo será una realidad el año que viene. Mientras que la compañía europea financiará el desarrollo y promoverá la comercialización, la ESA se encargará del lanzamiento, la instalación y las operaciones.
Es la primera vez que una asociación comercial europea ofrece la oportunidad de llevar a cabo experimentos científicos y demostrar tecnologías fuera de la Estación.
La plataforma Bartolomeo, bautizada en honor del hermano pequeño de Cristóbal Colón, se montará en la cara anterior de Columbus, a 400 km de la Tierra. Los usuarios disfrutarán de 10 Gbit/s de enlace descendente de datos: suficiente para descargar una película de alta definición en 30 segundos.
La fórmula para el tamaño de las cargas útiles es flexible. Los usuarios pueden incluir equipos de tan solo 5 kg compartiendo el viaje con otros experimentos, o reservar un espacio completo de hasta 450 kg en exclusiva.
Bartolomeo ofrece 11 espacios y el tiempo de espera desde la firma del contrato hasta el despegue es de uno a dos años, muy inferior al plazo habitual para experimentos. El acuerdo de alquiler en el espacio es de un año como mínimo.
El lanzamiento de Bartolomeo está previsto para 2019 a bordo de una nave SpaceX Dragon. (Fuente: ESA)