China ha ampliado su flota de satélites civiles de observación de la Tierra. El 18 de mayo lanzó un cohete CZ-4C con el vehículo Gaofen-5 a bordo, el cual fue colocado en una órbita heliosincrónica de unos 700 km de altitud.
El despegue se realizó a las 18:28 UTC, desde la base de Taiyuan. En su órbita actual, el Gaofen-5 operará durante al menos 8 años enviando imágenes en alta resolución de la superficie de nuestro planeta. Para ello transporta cámaras hiperespectrales, multiespectrales, infrarrojas y de polarización, entre otros instrumentos para estudios medio ambientales.
El satélite ha sido construido por la organización china SAST, sobre una plataforma SAST-5000B.