Un estudio publicado por The National Institute of Health revela que consumir un diente de ajo al día previene ciertas enfermedades cardiovasculares, y tiene efectos anti tumores y anti bacterianos. Por si fuera poco, dormir con uno debajo de la almohada trae estos beneficios.
- Evita la gripe y el resfriado
Ya que el ajo es un antihistamínico natural, mejora el sistema respiratorio y descongestiona las vías.
- Mejora el sueño
El ajo es rico en zinc, que, entre otras cosas, mejora la calidad del sueño, ya que provoca un efecto calmante.
- Mejora el rendimiento físico
El ajo estimula tu cuerpo de forma variada: durante el día mejora el rendimiento físico de tu cuerpo, pero durante la noche estimula el sueño, lo que te ayuda a descansar y contribuye aún a un buen estado físico al día siguiente.
- Alivio de la tos
El ajo es un excelente expectorante, por lo que eliminarás las flemas que se encuentran alojadas en las vías respiratorias y mejorará la función de los bronquios.
- Mejora la circulación
La vitamina B presente en el ajo potenciará la circulación sanguínea, previniendo coágulos de sangre.
- Antibiótico natural
El sistema inmune no es el único beneficiado: las cicatrices o heridas cutáneas se ven protegidas por el ajo, que evita que se infecten.
- Mejora las funciones hepáticas
El ajo elimina toxinas y depura el hígado. De la misma manera, las vitaminas A, B y C que contiene potencian las funciones hepáticas.
- Retrasa el envejecimiento
El ajo es un excelente antioxidante. Comerlo de manera moderada te ayudará a regenerar células muertas en el organismo, convirtiéndolas en células productivas.