Muchas mujeres, sufren de un síndrome sin saberlo!!!
enero 29, 2019 | Faddi Nassar
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El Síndrome de Sheehan es una enfermedad poco conocida pero (lamentablemente) bastante frecuente que afecta la hipófisis y que aparece en mujeres que han sido madres biológicas.
Este síndrome es más común en países pobres o en vías de desarrollo, no siendo particularmente prevalente en países desarrollados. Esto es debido a que, en gran medida, la aparición del síndrome de Sheehan tiene que ver con una atención deficitaria en el sistema de salud.
Síntomas del Síndrome de Sheenan
Algunos síntomas pueden aparecer apenas poco tiempo después del parto. Por ejemplo, es bastante común que una madre se dé cuenta de que tiene este problema porque es incapaz de amamantar a su bebé.
Sin embargo, en mujeres en las que el daño fue menor, pueden pasar años sin descubrirlo, y hacerlo recién ante una situación de estrés físico extremo, como una infección grave o una cirugía, que desencadena una crisis suprarrenal.
Los síntomas más comunes del Síndrome son:
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Dificultad o incapacidad para amamantar
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Ausencia de períodos menstruales (amenorrea) o períodos menstruales poco frecuentes (oligomenorrea)
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Incapacidad de que vuelva a crecer el vello púbico afeitado
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Disminución de la función mental, aumento de peso y dificultad para mantearse alerta como resultado de la baja actividad de la tiroides (hipotiroidismo)
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Presión arterial baja (hipotensión)
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Bajo nivel de azúcar en sangre (hipoglucemia)
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Fatiga
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Latidos del corazón irregulares
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Reducción de las mamas
Factores de riesgo de la enfermedad
Cualquier enfermedad que aumente la posibilidad de sufrir una pérdida intensa de sangre (hemorragia) o presión arterial baja durante el parto, como tener un embarazo múltiple o tener un problema con la placenta, puede aumentar el riesgo de padecer el síndrome de Sheehan.
Sin embargo, con una atención médica adecuada y un control bien realizado durante el trabajo de parto deberían disminuir casi a cero las posibilidades de tener este problema.
En cambio, los partos en espacios no seguros, especialmente en países con menos recursos, pueden hacer frecuente este síndrome.