El 8 de febrero, la nave de carga Cygnus NG-10 abandonó la estación espacial internacional, una vez concluida su misión junto a ella. El vehículo fue separado del módulo Unity a las 13:45 UTC, gracias al brazo robótico Canadarm-2, y finalmente liberado a las 16:16 UTC.
La Cygnus no regresaría inmediatamente a la Tierra, sino que aumentaría un poco su altitud para disponerse a soltar a dos satélites cubesats. Alcanzados los 450 km de altitud, liberó a las 16:00 UTC del 9 de febrero a los satélites Quantum Radar-1 y 2, dos reflectores pasivos estadounidenses.
Antes de destruirse en la atmósfera, lo cual está previsto para el día 25 de febrero, la Cygnus debe liberar los cubesats MySat-1 y CHEFSat, el primero propiedad de Emiratos Árabes Unidos y el segundo de la NASA, y otro llamado KickSat2, un cubesat 3U que transporta 100 diminutos ChipSats.