La intolerancia al gluten es una enfermedad crónica la cual se caracteriza por una malabsorción de nutrientes por estar la mucosa del intestino delgado deteriorada. Si se lleva a cabo un correcto diagnóstico, se pueden evitar muchos síntomas y complicaciones.
¿Cuál es la causa de la aparición de la intolerancia al gluten?
No existe una única causa responsable del desarrollo de la intolerancia al gluten. Es una combinación de factores lo que hace que la intolerancia aparezca.
Una predisposición genética, ciertas anomalías estructurales en el intestino delgado y una dieta con gluten son ejemplos de los factores predisponentes al desarrollo a la intolerancia al gluten.
Por todo lo mencionado, podemos decir que se trata de una enfermedad intestinal que surge en personas genéticamente susceptibles. Estas personas tienen una intolerancia para digerir una proteína presente en el gluten, la gliadina.
Cuando estas personas comen alimentos con gluten, su intestino delgado reacciona y se inflama. Cuando esto ocurre, el intestino tiene dificultad para absorber los nutrientes de los alimentos necesarios.
Síntomas de la intolerancia al gluten
Si una persona intolerante al gluten ingiere algún alimento que lo contenga, creará una respuesta autoinmune que provocará una inflamación y deterioro de la mucosa del intestino delgado. Así, se suelen presentar, entre otros, los siguientes síntomas:
- Náuseas.
- Vómitos.
- Diarreas.
- Bajo peso.
- Problemas de crecimiento.
En el caso de los adultos, la mayoría de los casos tiene una sintomatología más discreta con síntomas como ligeras diarreas, pérdida de peso, anemia o, en el 10 % de los casos, estreñimiento.
Como el intestino delgado no es capaz de absorber los nutrientes necesarios, se produce una malabsorción intestinal. Debido a ella, se pueden presentar otros síntomas como los hematomas o sangrado nasal.
A su vez, es normal que el paciente tenga cansancio o sufra picores en la piel, llegando a desarrollar dermatitis herpetiforme e incluso tener pérdida de cabello.
Además, también aparecen úlceras en la boca y las mujeres suelen estar ausentes de la menstruación. También es común padecer calambres musculares o tener intolerancia a otros nutrientes como puede ser la lactosa.
¿Es posible la celiaquía sin síntomas?
Hay que tener en cuenta que no todos los pacientes que son intolerantes al gluten presentan los síntomas mencionados, ya que hay algunas personas que no presentan ningún síntoma.
En estos casos, nos podemos preguntar cómo es posible que estén diagnosticadas de esta enfermedad si no presentan síntomas.
La explicación la hallamos en que la intolerancia al gluten es una enfermedad en la que existe una predisposición genética, y para su diagnóstico, como hemos visto, se realiza un análisis de sangre con marcadores de la enfermedad. Sin embargo, sí se puede observar deterioro intestinal tras una biopsia.