Detectar el estado emocional de un individuo a partir de la representación que este hace de su postura corporal es posible a través de la app EmoPose, diseñada por un equipo de investigación en el que participa la Universidad Complutense de Madrid (UCM) en España.
La herramienta, descrita enExperts Systems with Aplications, clasifica las posturas corporales (diseñadas en 3D por el usuario) en las seis emociones básicas Ekman (enfado, asco, miedo, felicidad, tristeza y sorpresa) y en el estado neutral.
“La finalidad es que el usuario sea más consciente de sus posturas, sus emociones y la relación entre éstas, para poder mejorar ambas. Algunos estudios revelan que adquirir ciertas posturas puede ayudar a reparar ciertas emociones y viceversa”, describe Iván García-Magariño, investigador del Grupo de Investigación en Aplicaciones Sociales e Interdisciplinares basadas en Agentes (GRASIA) de la UCM y autor principal del estudio.
EmoPosefunciona a través de un avatar sobre el que el usuario puede, de forma fácil e intuitiva, manipular sus pies, cabeza, rodillas, codos, incluso, la mirada. La app permite centrarse en las posturas de las manos, “cuyo grado de relación con las emociones ha demostrado ser alto”, añade García-Magariño para configurar diferentes aperturas (puños, manos abiertas o relajadas en una posición intermedia).
“Cuando el usuario termina de representar la postura corporal, la herramienta estima qué emoción probablemente esté teniendo el usuario según su postura. El individuo puede conformar si es cierto o no para darle retroalimentación a la herramienta”, añade el informático de la UCM.
El investigador resalta la importancia del estado emocional en la vida personal y laboral de los seres humanos. Además, adelanta una nueva aplicación sobre la que EmoPose podría actuar y que forma parte de una propuesta de proyecto europeo con esta app: el tratamiento psicológico de pacientes sometidos a tratamientos oncológicos.
“En esta línea, herramientas como EmoPose y su posible mejora futura con detección automática de posturas podrían ser una pieza clave en el seguimiento de los supervivientes para que médicos, psicólogos y familiares atiendan de manera temprana sus necesidades y así contribuir a mejorar la calidad de vida de este colectivo”, concluye García- Magariño. (Fuente: UCM / DICYT)