La reproducción de la langosta del desierto, acrecentada por las lluvias torrenciales, amenaza las zonas agrícolas de Yemen, Sudán, Eritrea, y partes de Etiopía y el norte de Somalia durante los próximos tres meses, alertó recientemente la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, FAO.
La plaga podría afectar los cultivos y afectar las economías locales, perjudicando la seguridad alimentaria y los medios de subsistencia, asegura la agencia.
Enjambres de decenas de millones de langostas pueden volar hasta 150 km diarios empujadas por el viento. Un insecto adulto puede consumir aproximadamente su propio peso en alimentos frescos a diario, unos dos gramos. Un enjambre pequeño consume la misma cantidad de alimentos al día que unas 35.000 personas.
De acuerdo con la FAO, este año ya se ha realizado operaciones intensivas terrestres y aéreas contra la plaga en Irán, Arabia Saudita y Sudán que, aunque redujeron poblaciones de langostas, no pudieron evitar que se formaran enjambres que ahora se desplazan a sus zonas tradicionales de reproducción estival en Yemen, el Cuerno de África y a ambos lados de la frontera indo-pakistaní.
Yemen, el país más amenazado
Actualmente existe el riesgo de que la amenaza de la langosta se agrave más en el interior y las zonas costeras de Yemen, lo que pone en riesgo la producción agrícola a finales de este verano. También se espera que aumenten las poblaciones de estos insectos en ambas riberas del Mar Rojo a partir de noviembre.
Yemen es el país más amenazado debido a las infestaciones generalizadas y a las fuertes lluvias que provocarán la formación de enjambres a partir de esta semana, lo que podría dar lugar a otra generación de langostas a finales de agosto, si las condiciones meteorológicas siguen siendo favorables.
En el peor de los casos, estos insectos podrían migrar de ese país en otoño al Cuerno de África y llegar a Kenia a finales de año. Las langostas del desierto invadieron Kenia por última vez en 2007 y se requirieron operaciones aéreas para controlar la situación.
En el noreste de Somalia, en las últimas semanas se han visto plagas que ya han causado importantes daños a las cosechas. Ya se están formando grupos a lo largo de la costa noroeste y probablemente en el noreste a partir de los huevos puestos por los enjambres, lo que podría dar lugar a que surjan otros nuevos hacia finales de agosto.
Se espera que ocurra una reproducción similar en el este de Etiopía, mientras que grupos de langostas adultas podrían desplazarse desde la región septentrional de Amhara a las zonas de reproducción estival en el oeste de Eritrea y el interior de Sudán.
En Sudán se ha detectado un elevado número de insectos adultos en el Valle del Nilo, mientras que algunos han aparecido recientemente en la costa del Mar Rojo y en Kordofan del Norte.
¿Cómo se puede combatir?
La FAO asegura que se requieren operaciones de emergencia para combatir la langosta del desierto, salvaguardar los cultivos y mitigar la infestación en Yemen y su consecuente invasión a países vecinos.
Actualmente las actividades de vigilancia y control de los insectos se ven obstaculizadas por la inseguridad y por falta de recursos en ese país. Sin embargo, la FAO ya ha movilizado 100.000 dólares y se están implementando una serie de medidas urgentes en la zona de reproducción.
La Agencia también ha iniciado el proceso de compra de equipo adicional para aumentar la capacidad del Ministerio de Agricultura y permitir el control oportuno de la langosta en las zonas infestadas. Además, ha lanzado un llamamiento generalizado a la comunidad internacional.
Los principales beneficiarios de estas medidas son los agricultores, ganaderos y pastores nómadas cuyos medios de subsistencia estarán protegidos de los daños que el aumento de las infestaciones de langostas causaría,
La ayuda permitirá a unas 100.000 personas en las provincias de Lahij, Shabwah, Hadramout, Abyan, Saná y Al-Hodeidah proteger sus cultivos, previniendo así la pérdida de cosechas, que puede dar lugar a un aumento del hambre y la pobreza en las zonas rurales, que ya han sufrido las consecuencias del actual conflicto.
Aunque Sudán está mucho mejor equipado y preparado que otros países de la región, la actual situación política del país puede reducir la eficacia de las operaciones este verano. La capacidad operativa en Eritrea, Etiopía y Somalia septentrional sigue siendo también relativamente limitada, informó la FAO.
Dada la gravedad de la amenaza actual de la plaga, la agencia recomienda a todos los países hacer un seguimiento de la situación con de misiones periódicas de vigilancia sobre el terreno y la adopción de las necesarias medidas de control donde se haya detectado una infestación significativa de langostas. (Fuente: ONU)