Modelo miniaturizado de la nave Juice durante las pruebas de compatibilidad electromagnética en el corazón tecnológico de la ESA en los Países Bajos.
Juice, el Explorador de las Lunas de Hielo de Júpiter, es la próxima misión de la ESA que estudiará el planeta más masivo del Sistema Solar y sus mayores lunas: Ganimedes, Europa y Calisto. Tras su lanzamiento, previsto para junio de 2022, se embarcará en un viaje de siete años durante el cual efectuará varios sobrevuelos —concretamente, en la Tierra, Venus, la Tierra, Marte y, de nuevo, la Tierra— antes de salir del Sistema Solar interior rumbo a Júpiter.
Se cree que estas tres lunas poseen océanos de agua líquida bajo sus cortezas heladas y el instrumento Radar para la Exploración de las Lunas Heladas (RIME) de Juice se utilizará para estudiar la estructura de su subsuelo. Las señales de radar, emitidas a través de una antena de 16 m de largo, penetrarán en la superficie helada de las lunas jovianas hasta una profundidad de 9 km.
RIME será el primer instrumento de su categoría capaz de llevar a cabo mediciones subterráneas directas en el Sistema Solar exterior, y ofrecerá información clave sobre el potencial de estos cuerpos de albergar entornos habitables.
Una vez en el espacio, el rendimiento del instrumento se verá afectado por distintos factores, incluido el patrón de radiación de la antena. Para evaluar estos efectos, en septiembre se llevaron a cabo una serie de ensayos en la cámara de Hertz de la ESA, utilizando un modelo a escala 1:18 de la antena RIME, reducida a una longitud de unos 80 cm y montada sobre un modelo simplificado y a escala de la nave. (Fuente: ESA)