Muchas cosas cambian como producto de la depresión. Aunque no lo notemos nuestro cuerpo sufre alteraciones importantes producto de los desbalances químicos.
Aunque parezca que la depresión es un padecimiento netamente emocional que altera solo el estado de ánimo y los sentimientos, quienes la padecen también pueden sufrir cambios físicos y químicos en el cerebro que pueden afectar no solo la salud mental, sino del resto del organismo.
Este es un problema global más generalizado de lo que se cree. Según la Organización Mundial de la salud más de 300 millones de personas sufren de depresión en el mundo. Un promedio de 800 mil personas se suicidan cada año debido a la depresión. Además esta es la principal causa de muerte entre jóvenes de 15 a 29 años.
La depresión no es un cambio emocional pasajero. Las alteraciones que produce en el cerebro la hacen difícil de controlar en quienes la sufren. Por esa razón, es importante reconocerla y tratarla con un especialista, en lugar de pensar que es un mal momento anímico que desaparecerá por sí solo.
¿Qué pasa en el cerebro cuando nos deprimimos?
Tres partes del cerebro se ven directamente afectadas por la depresión: el hipocampo, la amígdala cerebral y la corteza pre frontal. En el siguiente espacio las repasamos en detalle.
1. Encogimiento del hipocampo
El hipocampo se encuentra en la zona central del cerebro. Es el encargado de almacenar la memoria y regular la producción de cortisol, conocido como la hormona del estrés y la felicidad.
Cuando sufrimos de estrés físico o mental, incluido el estrés por depresión, el cuerpo libera cortisol para intentar paliar los efectos del estrés. Sin embargo, cuando los niveles de cortisol son muy altos se produce un desbalance químico, la producción de neuronas disminuye y el hipocampo se encoge.
2. Encogimiento de la corteza pre frontal
Localizada en la parte anterior del cerebro, la corteza pre frontal se encarga de regular las emociones y crear las memorias. La corteza pre frontal también puede encogerse por el exceso de cortisol. Se cree que la falta de empatía de la depresión post parto está originada por esta causa.
3. Inflamación de la amígdala cerebral
La amígdala cerebral está localizada en lóbulo temporal, la parte central inferior del cerebro. Su función es regular las emociones como placer, felicidad o miedo, entre otras.
El exceso de cortisol también la afecta al inflamarla y hacerla más activa, lo que produce dificultad para dormir y patrones de conducta anormales.Además, al estar más activa hace que otras partes del organismo liberen más hormonas de lo normal y originen otras complicaciones de salud.
4. Falta de oxigenación
Además de las alteraciones directas que la depresión produce en el cerebro, otros cambios afectan la función cerebral indirectamente. Los estudios demuestran que el cuerpo se oxigena menos en los periodos de depresión. No se sabe si se debe a cambios en los patrones de respiración o a otra razón.
Las células del cuerpo en general se ven afectadas por la reducción de oxígeno. En particular las células del cerebro pueden sufrir daño o morir.
Algunas de las consecuencias que los cambios físicos y químicos que produce la depresión en el cerebro son los siguientes
- Pérdida de memoria
- Disminución de la función de los neurotransmisores
- Estancamiento del desarrollo cerebral
- Disminución de la capacidad de aprendizaje
- Problemas cognitivos
- Problemas de concentración
- Cambios en el estado de ánimo
- Falta de empatía hacia los demás
- Dificultad para dormir
- Fatiga