En general, se habla de alimentos saludables y recomendables en general, como si todas las personas fuéramos iguales. Los expertos también han recomendado ciertos alimentos paras ciertas personas, puede ser debido a su organismo, o algún problema específico de salud. Pero otro de esos factores que siempre deberíamos tener en cuenta debería ser la edad.
A continuación, te mostraremos cuáles son los indicados para tu salud de acuerdo a tu edad.
LOS 20S
Puede que a esta edad apenas nos estemos convirtiendo en independientes y tengamos en nuestra nevera comida chatarra vieja, una que otra fruta olvidada, pero más que todo alimento procesados. Los 20s son los años en que deberíamos estar construyendo el cuerpo que disfrutaremos en el futuro y que preparamos para prevenir futuras enfermedades.
Los alimentos más recomendables en esta etapa son los ricos en calcio y vitamina D. El calcio debe ser incorporado en nuestra dieta a esta edad ya que es la etapa en la que los huesos lo absorberán con mayor facilidad. “Productos lácteos, vegetales, como el brócoli, y frutos secos. Unos menús que son además compatibles con la dieta vegetariana“.
Las frutas y verduras frescas son otra opción importante, dotando al cerebro de energía en los años de demanda física, energética y nutricional. Lo que menos deberías comer son las frituras, envasados y alimentos industriales procesados.
LOS 30S
Probablemente ya tengas niños en la casa, por lo que las responsabilidades se multiplican y el trabajo es un extra, todo esto se traduce en estrés, pero también dice que las responsabilidades en exceso no deberían ser excusa para una dieta desorganizada.
“Si planificamos un menú y dedicamos un espacio no demasiado amplio a hacer una compra semanal, organizaremos mejor nuestras rutinas y, sobre todo, ganaremos en salud”. La mejor recomendación serán los productos frescos ricos en fibras como las verduras y las grasas benignas provenientes del aceite de oliva y los frutos secos, este tipo de grasa sacian más rápido y controlan el peso.
Lo que hay que evadir a toda costa son los procesados, envasados y los alimentos industriales con alta cantidad de sal y conservantes. El especialista asegura que el café y el alcohol deshidratan y estresan de manera importante el ciclo de sueño, provocando la inestabilidad del peso.
LOS 40S
En esta etapa el organismo y las hormonas comienzan a comportarse de una manera muy diferente. Las dietas que se recomiendan aquí son las que tienen como protagonista los vegetales crucíferos como el repollo, el brócoli y la coliflor, estos vegetales tienen una capacidad estabilizadora en el organismo.
Los pescados del tipo del salmón, atún y sardinas contienen ácidos grasos omega 3 y fortalecen el sistema inmunológico. Esta grasa comienza a trabajar en la prevención de enfermedades. Los productos procesados y envasados nunca serán una opción, los alimentos ricos en sal deberían ser ingeridos con más atención, la sal es un gran detonante de la presión arterial y a esta edad es muy vulnerable.
“Conforme pasan los años, los procesos fisiológicos se ralentizan. El gasto metabólico es menor lo que, unido a la disminución general de la actividad física en la vida cotidiana, desemboca en menos gasto energético. Por consiguiente, hay menos necesidades calóricas que cubrir a través de los alimentos” comenta Marta Cuervo, doctora en Fisiología.
LOS 50S
La llegada de esta edad significa para muchas personas un punto decisivo, la voluntad de cuidarse y alimentarse mejor se vuelven una obligación. También es el periodo en el que el cuerpo por desgracia empieza a deteriorarse, y las consecuencias son más visibles en las mujeres, que padecen acaban de superar la menopausia y la consiguiente y paulatina pérdida de estrógeno.
Hipertensión, diabetes y otros achaques se empiezan a asomar, por lo que el alcohol, las grasas trans, las carnes rojas y las procesadas, también los embutidos, deben pasar a asumir un papel testimonial en nuestros menús, si no queremos exponernos al desarrollo de otras enfermedades.
Para enfrentar esto o mejor será tener siempre presente los alimentos ricos en calcio, la leche, las judías blancas, las almendras y frutas como las naranjas y los kiwis, además de la fibra, que regula el apetito y reduce el colesterol.
LOS 60S
Ahora toca pensar en la salud cognitiva y la cerebral. “Los vegetales frescos aportarán compuestos como el polifenol, que protegerán la función neuronal y pelearán contra la oxidación celular“, dice San Mauro, quien invita también a consumir y las legumbres que tendrán los mismos beneficios.
En cuanto a las proteínas, las presentes en carnes y aves de corral ayudarán a la combatir la perdida de músculo. Las grasas saturadas son tu peor enemigo durante esta edad, el corazón debería ser otro factor a cuidar y estas grasas son incitadoras de ataques cardíacos.